Cerré los ojos
esperando el golpe final... pero no llegó. Los abrí lentamente, y pude ver cómo
mi rival, tumbado en el suelo, se desvanecía con un agujero en la cabeza. Miré
a mi alrededor, y vi al francotirador de mi equipo, que me saludaba.
-Uf, creí que no lo
contaba. Gracias - le dije por radio, y le devolví el saludo. Pero me había
olvidado del francotirador enemigo, que me pegó un disparo directo al pecho,
tras lo cual salí empujada hacia atrás y me estampé contra la pared. Me cubrí
rápidamente y comprobé mi índice de salud: ¡había sobrevivido al golpe con 1 de
salud! Decidí volver rápidamente al lugar de renacimiento de mi equipo, pero oí
disparos detrás de mí, seguramente el equipo rival me perseguía.
Decidí que lo mejor
sería subir al tejado, al menos ahí estaría mejor protegida que en el suelo. Y eso hice, pero al llegar arriba uno del
equipo rival me había seguido volando, y dijo:
-Reza lo que sepas.
-Nah, no creo en esas cosas
- le respondí, invoqué mi Counter y me cubrí con ella. El intentó golpearme con
una Katana, pero quedó noqueado, y vi mi oportunidad, le di un uppercut con
todas mis fuerzas, enviándolo contra la pared de enfrente. Rápidamente invoqué
mi Smash y terminé el trabajo con una ráfaga rápida, tras lo cual se desvaneció
mientras caía al suelo.
-¡¡Eso ha sido
increíble!! - gritó el comentarista mientras el público celebraba mi actuación.
Entonces, vi a mi equipo que volvía a la carga. Me uní a ellos, esta vez
quedándome yo fuera del edificio mientras los curaba cubierta por la pared.
Hice bastante bien mi
trabajo... pero descuidé mis defensas, y antes de darme cuenta, una daga se
clavó en mi espalda y salió por mi vientre. Miré atrás para encontrarme con la sonrisa
de una chica. Me dejó caer, y antes de desvanecerme en dígitos, la vi volverse
invisible y la oí decir:
-Curandera abatida, no
tendremos problemas durante un tiempo.
Entonces, pasé a ver a
mi equipo, los cuales estaban siendo objetivo de fuego pesado. Los avisé por
radio:
-Cuidado, chica
invisible con daga va a por vosotros por detrás.
-Ya la veo - dijo uno,
el cual la abatió mientras se acercaba. Pero recibiendo tal cantidad de fuego,
terminaron siendo abatidos uno por uno. Reviví cuando aún quedaba un miembro de
mi equipo en pie. Fui lo más rápido que pude para sanarlo.
-¡Jope, otra vez esa
maldita curandera! ¡Ve a matarla! - oí claramente que gritaba un enemigo.
-¡Chicos, necesito
cobertura ya! - pedí por la radio.
-Refuerzos en camino.
Ya había terminado de
curar, así que miré a mi alrededor... pero no vi nada. Entonces, escuché ruidos
metálicos justo encima de mí, para luego ver cómo se levantó un poco de polvo
frente a mí. ¡Otra vez la invisible! Invoqué mi Counter.
-¡Bu! - gritó la chica
mientras se me abalanzaba.
-Otra vez no, quiero
vivir más - le respondí bloqueándola con mi Counter. Al hacerlo se volvió
visible y la golpeé, mientras mi equipo la disparó hasta que cayó al suelo y se
desvaneció -. Se agradece la ayuda chicos.
-No hay de qué linda.
Suspiré, pero
rápidamente seguí curando, y cuando no era necesario, cambié a arma y disparé.
Así durante unos 10 minutos, hasta que una voz femenina dijo:
-Primer tiempo
terminado. Pasando a entretiempo.
-Uf, por fin un
descanso - dije. Realmente estaba cansada, pero no un cansancio físico, sino
mental, ser curandera era realmente un trabajo difícil.
-Oh vamos, no irás a
decir que te cansa apretar teclas y el ratón - dijo un chico en tono burlón, y
los demás le rieron la gracia.
-Ja ja ja, muy
graciosos. Ya me gustaría a mí veros de curanderos, a ver si es tan fácil como
aparenta - respondí molesta.
-Entretiempo. ¡Baile
Fumbi! - y salen un grupito de Fumbis a bailar.
-Venga ya, es tan fácil
como coger esa cosa, el Mind Energy, y ponerte a curar.
-Vale, piensa lo que
quieras, pero es mucho más difícil que eso - le dije volviéndome a ver el baile
de los Fumbis.
-A ver, doña quejas,
¿por qué es tan difícil según tú?
Suspiré antes de
responder:
-A ver... para empezar,
tienes que tener un ojo en cada miembro del equipo, vigilar su barra de salud,
y correr a su lado cuando lo necesite. Después, teniendo la Mind en la mano no
puedes atacar. Y por último, si saben que eres
curandero, te marcarán como objetivo principal, y si tienen la más mínima
chance, te dispararán y te matarán. ¿Dónde está ahora lo fácil, eh?
Se quedó callado, quizá
sorprendido por todo lo que he dicho. A decir verdad, yo ya sabía lo que era
eso, ya había jugado de curandera en otros juegos, y sabía que sería un trabajo
duro, pero en este juego era sin duda más duro que en otros por el hecho de que
si están varios lejos, tendría que alejarme del grupo con el que iba para asistirlos.
-De acuerdo... dejemos
de ir cada uno por un lado. No nos separaremos esta vez, iremos en un grupo más
compacto, así ella podrá curarnos más cómodamente. ¿De acuerdo?
Me sorprendió ese
cambio tan repentino, pero me alegré, porque eso indicaba que mi trabajo no
sería tan difícil.
-De acuerdo -
respondieron los demás.
-Segundo tiempo en 10
segundos.
Los Fumbis hicieron una
reverencia y se fueron. Entonces comprobé el marcador, que no lo había visto:
íbamos 36 a 35 ganando mi equipo.
-5... 4... 3... 2...
1...
-¡Adelante! ¡Muestra tu
S4!
Esta vez mi equipo
apareció en el lado opuesto del almacén: un tejado arrinconado, un pequeño
edificio con un tanque de agua amarillo, cajas y tubos. Me moví con el grupo
principal, mientras el francotirador buscaba un sitio cómodo.
-Muy bien chicos, en
cuanto veáis un enemigo, fuego a discreción. Y tú ya sabes qué hacer,
curandera. No nos falles.
-No os fallaré, lo
prometo - dije ajustando mi Mind Energy.
En seguida empezaron
los disparos. Yo curaba conforme veía necesario, y me asomaba y disparaba si
veía que podía.
El plan salió bien en
primera instancia. Mi equipo avanzó una vez la amenaza enemiga era menor sin
dejar de disparar. Subimos conforme tuvimos oportunidad. Yo no dejaba de
vigilar la retaguardia, por si acaso. Subimos al balcón que quedaba enfrente de
la base enemiga.
Yo me puse con ellos a
cubrirles, pero no advertí la presencia del chico que subía por las cajas de al
lado bomba en mano hasta que la tiró. Cuando lo hizo, grité:
-¡CUIDADO, UNA BOMBA! -
y todos la vieron y salieron corriendo para ocultarse. Mi aviso funcionó porque
todos se salvaron.
-Bien, nos salvamos,
pero ahora que nos descuidamos nos pueden venir de cualquier parte. Permaneced
alerta.
Invoqué mi Smash, ya
que me sería más útil luchar que curar ante una posible emboscada. Entonces
miré abajo y dije:
-Chicos, ¿y si vamos
por abajo? Los pillaríamos por la espalda.
-Bien pensado linda.
Vamos - y bajaron los cuatro. Suspiré antes de seguirlos.
Avanzaron hacia afuera,
yo siguiéndolos. Pero apenas estaban en terreno abierto, sufrieron un duro ataque del enemigo, al menos vi a dos caer.
-Ups... no lo había
previsto. Perdón.
Me giré para volver a esperar a mi equipo, pero oí un
ruido de cadenas. Miré justo a tiempo de ver unas cadenas lanzándose contra mí.
Las esquivé a tiempo, y salí corriendo.
-¡Venga, encadénala! -
oí una voz apremiante de una enemiga.
-¡Ya lo intento! - dijo
una voz de chico, y volví a ver la cadena la cual ni me rozó.
Corrí hacia el lugar de
renacimiento de mi equipo, perseguida por las cadenas. No sabía qué pasaría si me alcanzaban, ni quería saberlo.
Corrí cuanto mis piernas me permitían, pero justo al alcanzar las cajas sentí
que algo se enredaba en mi brazo: la cadena me alcanzó, y empezó a enrollárse en mis brazos, sujetándolos por detrás de mi cuerpo, y sujetó mis piernas juntas, de forma que perdí el equilibrio y caí.
-Woah, ¿qué es esto? -
pregunté sorprendida mientras intentaba soltarme con todas mis fuerzas.
-Skill Bind - dijo un
enemigo acercándose -, no puedes hacer nada mientras dure, ni defenderte. Cualquier intento de escapar es inutil.
-Así es - dijo otra chica,
acercándose con una sonrisa -. ¿Unas últimas palabras antes de morir? - me
preguntó apoyándome la daga en el cuello.
-Entretenlos un poco
más, te salvaré - me dijeron por radio. No sabía cómo demonios me iban a
salvar, pero decidí intentar entretenerlos.
-Sí. ¿Por qué me odiáis
tanto? - le pregunté.
-Jajajajaja, no es nada
personal, créeme. Es sólo que nos incordias - me respondió -. Siendo la
curandera enemiga, no podemos permitir que sigas viva, entiéndelo querida.
Lanosa, está difícil curar, ¿eh?
ResponderEliminarhahahaha que guay *-* me gustan algunas de tus historias :D ¡FELICIDADES!
Está genial, muy bien descrito y una historia bastante original visto desde el punto de vista mas interno del S4 xD, me gusta bastante, será gracioso cuando Lanosa pruebe la HG o la Daga, o el anchor xD
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios ^^
ResponderEliminarLas armas y los modos los ira probando poco a poco xD y por cierto, lo que dice Lanosa de que ser healer es dificil es verdad, en el verdadero S4 tienes que cubrirte mientras curas, y rapidamente esconderte cuando eres el blanco del enemigo xD